Desarrollan un sistema de «cultivo universal» para producir células madre listas para los trasplantes
lunes, 28 de octubre de 2013

Fabricar células madre viables para su posterior uso de tratamientos en personas que seas seguras es uno de los retos en los que se encuentran imbuidos muchos cientÃficos de todo el mundo. Lo último lo acaban de publicar en Stem Cell un equipo de investigadores del Instituto Wellcome Trust MRC de la Universidad de Cambridge y se trata de un nuevo método para fabricar células madre para el hÃgado y el páncreas, lo que podrÃa permitir el cultivo de ambos tipos de células cantidades suficientes para su uso clÃnico en trasplantes.
Los investigadores aseguran que por vez primera han sido capaces de fabricar una población de células madre puras y capaces de autoregenerarse especÃficas para el intestino anterior, la sección superior del sistema digestivo humano. Las llamadas «células madre del intestino anterior» podrÃan desarrollarse aún más para producir células del hÃgado o del páncreas. El método mejora de forma significativa las técnicas existentes para el cultivo de este tipo de células madre y además abre la posibilidad de, en un futuro, las células podrÃan ser cultivadas en grandes cantidades. Eso harÃa posible su uso en terapias regenerativas, reparación de órganos o tejidos dañados y en el tratamiento de patologÃas como la diabetes tipo I o enfermedad hepática.
«Hemos desarrollado un sistema de cultivo celular que nos permite aislar especÃficamente las células madre del intestino anterior», señala Nicholas Hannan, quien dirigió el estudio. «Estas células tienen enormes implicaciones para la medicina regenerativa, ya que son los precursores de las vÃas respiratorias del tiroides, pulmones, hÃgado, el páncreas, el estómago y los sistemas biliares. Ahora tenemos un método capaz de crear todos estos tipos de células a partir de la población celular».
Desarrollo embrionario
Además los investigadores explican en su trabajo además que dicho sistema permitirá investigar en profundidad el desarrollo embrionario de las células del intestino anterior. «Ahora disponemos de una plataforma desde la cual podemos estudiar los patrones de comportamiento de eventos tempranos que ocurren durante el desarrollo humano previos a la producción de los intestinos, hÃgado, pulmones y páncreas», agregó Hannan.
El enfoque es sin duda un gran avance porque supera algunos de los problemas que actualmente limitan a los cientÃficos para cultivar las células asociadas con el hÃgado, el páncreas y otras partes del intestino anterior en un número lo suficientemente grande para uso clÃnico.
Los investigadores explican que el crecimiento de las células madre se inicia con las células madre pluripotentes humanas -células no especializadas que poseen el potencial de transformarse o «diferenciarse» en cualquiera de las tres capas principales de células que se encargan de desarrollar todos los tejidos y órganos-. Debido a que estas células también se autorenuevan, creando copias de sà mismas, ofrecen el potencial de proporcionar una fuente infinita de células clÃnicamente útiles para la medicina regenerativa.
Sin embargo, para lograr esto hace falta disponer de métodos que influyan en la diferenciación de estas células. Por ejemplo, para hacer crecer células del hÃgado o de páncreas, las células madre pluripotentes se diferencian en el endodermo -la capa de tejido primario asociada con los sistemas digestivo y respiratorio-, y ello proporciona una base de población de progenitores celulares que los investigadores pueden tratar de hacer crecer como células más especializadas. Lamentablemente el enfoque dista de ser perfecto. En concreto porque, explica Hannan, es difÃcil producir una población pura de los progenitores requeridos, ya que dentro del cultivo celular hay células «contaminadas», lo que no solo hace que sea difÃcil la identificación de las células diana para la diferenciación posterior en el laboratorio sino que puede complicar el uso de dichas células en terapias como el trasplante.
Para hacer frente a estas limitaciones, los investigadores analizaron las condiciones en las que las células madre se diferencian especÃficamente en el intestino anterior humano – la parte del sistema digestivo que se extiende desde la boca hasta el duodeno, incluyendo el hÃgado y el páncreas-. Mediante la manipulación de las vÃas de señalización celular, y variando el entorno en el que se desarrollaron las células y el sustrato sobre el que se cultivaron, los cientÃficos fueron capaces de aislar el cultivo necesario para la diferenciación de las células asociadas con el propio intestino anterior. Y comprobaron que cuando se desarrollaban poblaciones de células madre contaminadas bajo estas condiciones, éstas dejaban de proliferar y desaparecÃan gradualmente. Es decir, los expertos creen que han creado un sistema de cultivo universal que podrÃa ser utilizado para tratar cualquier paciente que necesita células para un trasplante.
Muy puras
Los resultados mostraron que las células eran «puras» y capaces de auroregenerarse y de diferenciarse en cualquier tipo de células del intestino anterior humano. Y además, al estar todavÃa en un estado autorenovación , podrÃan ser cultivadas en cantidades lo suficiente grandes como para ser utilizadas en tratamiento en humanos. Y dichas células no formaban tumores, por lo que son seguras y no tienen efectos secundarios.
Y aunque el procedimiento no mejora la capacidad para producir células del hÃgado o de páncreas en concreto, sà proporciona una población de origen mucho más pura para hacerlo. «Lo que tenemos ahora es un mejor punto de partida», señala Ludovic Vallier , autor principal del estudio. «Va a mejorar la calidad de las células que producimos y nos permitirá producir un gran número de células no contaminadas que necesitamos para la aplicación clÃnica de las terapia con células madre».
Fuente: www.abc.es